Desde que la humanidad descubrió el fuego, éste ha sido de gran utilidad en muchos campos. El fuego ha contribuido a su avance y el desarrollo tecnológico partió de su descubrimiento. No obstante, el fuego ha sido asimismo, un azote de la humanidad casi desde sus comienzos y hasta nuestros días.  La capacidad destructora de los incendios se manifiesta por desgracia con excesiva frecuencia, cobrándose numerosas vidas humanas y destruyendo innumerables bienes materiales.

Colombia es uno de los países más vulnerables a sufrir impactos y pérdidas económicas, por cuenta de inundaciones, deslizamientos, avalanchas, incendios, entre otros eventos que generan desastres que afectan la calidad de vida de la población. Los riesgos ocasionados por fenómenos naturales o por el hombre, de manera no intencional, deben identificarse y entenderse, según la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de

Desastres. Por esta razón, tanto a nivel institucional como personal, deben conocerse los roles y responsabilidades que existen en la prevención, reducción del riesgo y en el manejo de desastres.